Buenas tardes
Dr Tedros Adhanom Ghebreyesus. Director General de la Organización Mundial de la Salud
Dr. Andrew Black. Jefe Interino de la Secretaria del Convenio Marco de la OMS para el Control de Tabaco
Representantes de los Estados Partes del CMCT de la OMS
Representantes de los Estados No Partes del CMCT de la OMS
Equipo de la Secretaria del Convenio
Organizaciones Intergubernamentales en la condición de observadores
Organizaciones No gubernamentales en la condición de observadores
Miembros de la Prensa Nacional e Internacional Acreditados
Interpretes y Traductores Oficiales
Público acreditado
Señoras y Señores
El Convenio Marco de la OMS para el Control de Tabaco sin lugar a dudas ha trazado una ruta en la lucha emprendida por alcanzar una mejor salud, con mayor bienestar y calidad de vida, lucha que defiende el derecho a la salud y que se ha forjado con la participación de muchos actores, incluido el conjunto de la sociedad mundial, salvando muchas vidas mediante la prevención, la aplicación de medidas de eficacia comprobada y basadas en la mejor evidencia científica disponible, para un efectivo control de la demanda y oferta de los productos de tabaco, sus contenidos y emisiones tóxicas.
Es un tratado vinculante, que nos abruma con todas sus enseñanzas y es, sin lugar a dudas uno de los más grandes logros del multilateralismo en el seno de la Organización Mundial de la Salud, en sus 75 años de vida, hace cerca de 26 años sus Estados Miembros decidimos dar un paso sin precedentes e iniciamos su negociación.
Nuestro Convenio ha impactado en el descenso de las prevalencias de consumo de los productos de tabaco, nos ha permitido proteger a fumadores y no fumadores de los humos tóxicos del tabaco y construir mecanismos para vigilar y combatir la interferencia de la industria tabacalera.
Aprendimos, desde su negociación, a compartir nuestras experiencias acumuladas entre países y entre regiones, para seguir aprendiendo los unos de los otros; a trabajar colaborativamente con las ONG´s libres de conflicto de interés, a entender el significado de las orquídeas y del cenicero sucio, como parte del intercambio entre actores con diferentes roles, pero con un objetivo común, la salud pública.
También nos ha enseñado sobre la importancia de la diplomacia en salud, generando capacidades invaluables para enfrentar los desafíos y las complejidades de su implementación.
Este 20vo aniversario del Convenio Marco, justamente conicide con la Undécima sesión de la Conferencia de las Partes y me hace reflexionar en torno a como continuar y en los temas pendientes y rezagados para su aplicación integral. Los ODS´s y las enfermedades crónicas no transmisibles, no nos permiten que hagamos una pausa, cada vez más, se hace necesario reenfocar nuestras estrategias y acciones, a fin de alcanzar el descenso de 30% en la prevalencia de uso de productos de tabaco.
Enfrentamos nuevos retos, como los productos novedosos de tabaco y nicotina, que por su naturaleza intrínseca son adictivos, afectando particularmente a nuestros jóvenes y mermando la salud de muchos, según hallazgos de investigadores independientes, que han generado evidencia que así lo indica.
Perpetuar la adicción no es una opción, ella es en si misma un problema de salud pública. La dependencia a la nicotina es clasificada con el código F 17.2 de la Décima Clasificación Internacional de Enfermedades y a ella se suma la ocurrencia de enfermedades y mortalidad asociada.
La Undécima Conferencia de las Partes, que me honrran en presidir, nos da la oportunidad de examinar los progresos realizados a escala mundial y con ello, remirar la ruta trazada, para reforzar lo que hemos hecho bien y retormar temas pendientes. Nuestro lema: “Planeta sano, futuro sano: unámonos por un mundo sin tabaco para las próximas generaciones» nos lleva al abordaje de una agenda que incluye una vasta gama de temas, todos ellos relevantes y sustantivos.
Las Partes concientes de los retos y desafíos que tenemos, dando un paso adelante han presentando múltiples proyectos de decisión, enfatizando la necesidad de aplicar medidas para prevenir y reducir el consumo de tabaco, la adicción a la nicotina, la exposición al humo de tabaco, de cara a la estrategia de la industria tabacalera sobre la «reducción de daños», y haciendo referencia a los artículos 5.2 b y 5.3 del CMCT de la OMS, iniciativas que nos permitirán el abordaje de estas preocupaciones.
La cadena de producción y uso de los productos de tabaco ocasiona un impacto negativo en el medio ambiente, de allí la relevancia de generar decisiones para mitigar este impacto. La evidencia científica indica que los desechos de los productos de tabaco convencionales (los filtros, por ejemplo) y de los productos novedosos son peligrosos para la salud ambiental y de las personas, reiterándonos el llamado a la acción y a la articulación entre tratados multilaterales, como el Convenio de Basilea que clasifica a los dispositivos electrónicos, en general, como desechos peligrosos.
La realidad de hoy, es que a nivel global la industria tabacalera renueva sus ataques y estrategias, y que los Estados Partes, debemos proteger con firmeza el Convenio Marco de esta interferencia, para que de manera responsable y con liderazgo avancemos paso a paso hacia la aplicación plena del Convenio Marco y del Protocolo para Eliminación del Comercio Ilícito de Productos de Tabaco, guiados por sus directrices, indistintamente de nuestras realidades particulares, pero siempre enfocados en la necesidad de proteger la salud de nuestras poblaciones.
La construcción de alianzas intersectoriales, interagenciales y con ONG´s libres de conflictos de interés seguirá siendo clave en la sostenibilidad técnica, financiera y política, otorgando viabilidad a la aplicación de planes, estrategias e intervenciones colectivas en pro de la implementación del Convenio Marco, donde su Secretariado juega un rol sustantivo, muchas gracias al equipo por su permanente e inquebrantable compromiso.
Estoy segura, que de esta Undécima Conferencia de las Partes del Convenio Marco de la OMS para el Control de Tabaco, obtendremos excelentes resultados para la salud global, en el marco del consenso y del multilateralismos que han sido nuestra guía a través del tiempo.
Me honra ser parte de la apertura de esta sesión, he sido testigo del impacto del Convenio Marco desde su creación y, hoy como presidente de la COP11, sigo viendo cómo este tratado brinda a los países las herramientas necesarias para proteger a sus poblaciones de la devastadora epidemia del tabaquismo.
Celebramos con orgullo estos 20 años de avances, compromiso y vidas salvadas, llevando adelante el espíritu del multilateralismo, mientras seguimos trazamos juntos el futuro del control del tabaco a nivel mundial.
Gracias